Frugalisme o como gastar menos en jubilación anticipada
La vida en sociedad ha dado lugar a muchas formas de vida entre hombres. Basándose en sus propios principios, conducen a sus seguidores a adoptar hábitos inusuales. Este es particularmente el caso de frugalisme, Una forma de vida que propugna la jubilación anticipada. De qué debe entenderse realmente? frugalisme ? Porque no se trata sólo de enriquecerse o ganar la lotería. Para ser financieramente independiente, el frugalista adopta estrategias para hacer crecer su capital.
Vaya aquí para descubrir esta forma de vida que inspira cada vez más personas en el mundo.
¿Qué es el frugalisme?
el el frugalisme es una forma de vida que consiste en vivir por debajo de sus posibilidades, durante el periodo de actividad para ahorrar para beneficiarse de una jubilación fácil, pero sobre todo de jubilación anticipada. Así, mientras todavía es activo, el frugalista deja dinero aparte para constituir un presupuesto para preparar sus días de inactividad.
Aunque ahorrar para su jubilación, el frugalista también opta por comportamientos cotidianos algo educados. Así, reduce sus gastos al mínimo estricto, se abstiene de las actividades de ocio y vive con total sobriedad. La idea de frugalisme también tiene como objetivo reducir la jornada laboral para permitirse un periodo de descanso más largo.
Aunque es similar al minimalismo, el frugalisme es una práctica completamente diferente. El primero busca la tranquilidad en todo, mientras que el segundo defiende la disciplina para encontrar la emancipación.
Las ventajas del frugalisme
Nacido en Estados Unidos, el frugalisme se practica ampliamente en todo el mundo, especialmente en España. Este entusiasmo por esta práctica de la vida se debe principalmente a las ventajas que ofrece.
jubilación anticipada
La jubilación anticipada es la ventaja principal del frugalisme. Si la edad media para finalizar la carrera profesional es de unos 60 años, al frugalista le gustaría hacerlo en torno a los 40 años. Por lo tanto, opta por una carrera que no supondría ninguna restricción para ir a la jubilación. Una vez inactivo, el frugalista aprovecha sus días para descansar, cuidar de su familia y entregarse a actividades que lo hacen feliz.
libertad financiera
Durante su periodo de trabajo, el frugalista se toma el tiempo para ahorrarse el sueldo. También se encarga de hacer inversiones que le reporten grandes ingresos. Así, garantiza su libertad financiera durante su jubilación. Al optar por esta forma de vida, el frugalista hace todo lo posible para garantizar posteriormente un equilibrio financiero. Este último consistirá en tener ingresos para todas sus necesidades de jubilación.
Cómo convertirse frugalista?
ser frugalista, debe tomar determinadas decisiones de gestión y de vida. A menudo se relacionan con la profesión, los gastos o la inversión financiera.
Ejercer una profesión favorable al frugalisme
La práctica del frugalisme implica tener un trabajo que genere ingresos relativamente grandes. Esto es particularmente el caso en España de los ingenieros, ejecutivos y similares, arquitectos inmobiliarios, profesiones relacionadas con Internet, etc. Las actividades profesionales que permiten hacer horas extras también son favorables al frugalista.
Las profesiones practicadas por los frugalistes también le deben permitir tomar la jubilación anticipada. Será más difícil que un funcionario pueda ejercer la práctica a diferencia de un trabajador autónomo. Las profesiones liberales son, por tanto, las que corresponden mejor a frugalista en primera posición.
Minimizar los gastos
El movimiento del frugalisme pone especial énfasis en la gestión de los gastos diarios. De hecho, las diversas compras y objetivos están destinados a gastar lo menos posible de su salario. Ya sea vivienda, comida, muebles, ropa y mucho más, el frugalista opta por el mínimo estricto en su consumo. A su presupuesto sólo se tienen en cuenta los gastos importantes.
El frugalista no necesita una casa grande. Una vivienda sobrio que le ofrezca seguridad y refugio es más que suficiente para alcanzar su objetivo. Es lo mismo para muchos equipos informáticos y electrodomésticos que prefiere prescindir. Para los frugalistes, el útil siempre supera lo placentero en acciones y decisiones.
Haga buenas inversiones financieras
Las inversiones financieras también son importantes en la vida del frugalista. Como que quiere trabajar menos, debe encontrar metódicamente fuentes de ingresos que cubran sus necesidades de inactividad. Así, las inversiones en bienes raíces, la bolsa, las acciones, las divisas fuertes (euros, dólares), el comercio o los bloques son algunas de las vías seguidas por frugalisme para construir capital.
Al hacer buenas inversiones que le aportarán ingresos durante el año o más tarde, el frugalista asegura que puede cubrir todas sus necesidades durante su jubilación. Con los dividendos y rentas inmobiliarias que recibirá al final de cada mes o año, podrá acumular un gran capital para pasar los días sin trabajar o haciendo muy poco.
Cómo gastar menos?
Uno de los objetivos del frugalisme es gastar lo menos posible. Sin embargo, no es fácil ser financieramente independiente cuando no se sabe por dónde empezar.
Ahorra dinero en todos los gastos
Los gastos son esenciales para vivir en sociedad, pero todavía es posible gestionar adecuadamente. Para ello, el frugalista hace cada compra con rigor y método. Por lo tanto, sólo el producto que se utilizará exactamente para cubrir la necesidad para la que se ha comprado se comprará para su consumo.
Al reducir el importe de cada compra de comida o ropa a lo estrictamente necesario, los frugalistes consiguen ahorrar unos cuantos euros en cada gasto. De este modo, se acostumbran a una forma de vida racional pero peculiar. De repente se dan cuenta de ahorros que les serán útiles durante la jubilación. Las inversiones en la bolsa y este ahorro en gastos constituyen ingresos importantes para el presupuesto del frugalista.
Esté satisfecho con el mínimo indispensable
La práctica del frugalisme obliga a estar satisfechos con el mínimo estricto. Ya sea por alojamiento, comida, ropa o incluso para viajar en coche, el frugalista hace la opción del mínimo en su inversión. Siempre que sus elecciones le permitan cubrir la necesidad expresada, puede concederla. Por tanto, no hay duda de cambiar de equipo siempre que cumpla las funciones para las que fue adquirido.
Ropa de diseño, artículos de lujo, dispositivos de alta tecnología lanzados recientemente o incluso Internet no son cosas para él. Cuando en casa puede subarrendar una habitación o el garaje, el frugalista no duda en alquilarla para obtener ingresos.
Privarse de ciertos placeres inútiles
La vida del frugalista también está hecha de privaciones. De hecho, el ocio, las distracciones y ciertos placeres constituyen grandes gastos a largo plazo. Si es posible privar de ella sin que afecte de ninguna manera esta etapa de su vida, también lo podría hacer. Es en este movimiento de ideas que se inscribe el frugalista, que no encuentra ninguna razón para disfrutar de ciertos placeres.
Los restaurantes con la familia, las salidas con los amigos o incluso los viajes turísticos en coche son gastos innecesarios para el frugalista. El dinero que se utilizarán para cubrirlos se pueden reinvertir y constituir ingresos para más adelante. También puede estar fuera del período en que ya no trabaja. Así, su capital permanece conservada durante mucho tiempo.
Esta manera de lograr la independencia financiera se puede ver como un trampolín hacia la libertad. Pero ganar libertad tiene un precio que no todo el mundo está dispuesto a pagar. A fuerza de proyectarnos hacia el futuro, nos podemos perder y olvidar aprovechar el momento presente, alejarnos de nuestra familia y de la gente que nos rodea.
A veces se trata de sacrificar el presente por un futuro que quizás sólo existirá en nuestra imaginación.